QUERÍAN VERTE, JESÚS
Almudena Escrig
Coordinadora del Consejo Joven de RPJ
almudenaescrig@escolapiosemaus.org
Hola Jesús. No sé cómo explicarte lo que se ha vivido en las calles de muchas ciudades esta Semana Santa. Tampoco sé si es porque se echaba de menos la fiesta o porque de verdad querían verte. La gente esperaba horas junto a una valla con tal de tener el primer sitio y las mejores vistas; daba igual cómo estuvieras: subido a un pollino, de cena con tus amigos, prendido, en la cruz, muerto o resucitado. Se respiraba incienso, emoción, miradas al cielo, lágrimas e incluso penitencia.
Querían verte.
Yo también te fui a ver, pero sabía que en realidad allí, en esas imágenes, no estabas. En un minuto conseguí parar el tiempo y levanté la vista; solo veía móviles inmortalizando el momento, niños subidos encima de sus padres, y personas hablando en otros idiomas mientras las imágenes pasaban por delante. Por un lado, me preguntaba: «toda esta gente, ¿en realidad te sigue, o solo están viviendo la fiesta por ser fiesta?». Por otra parte, sentía pena, porque seguramente más de la mitad de los allí congregados no sabía de qué iba la cosa y la emoción del momento sería pasajera (o igual no).
Me imaginé en ese momento subiendo al Calvario, con nuestra cruz a cuestas. Supongo que sería un espectáculo y la gente saldría a verlo, sin darse cuenta del profundo sentido que tenía. Solo Tú lo sabías.
Aquí creo que ha pasado algo parecido: videollamadas dentro de la iglesia, fotos y vídeos para el recuerdo… Pleno siglo XXI.
Ojalá que todos los que te fotografiaban, guarden esas imágenes para recordar y celebrar la alegría de la resurrección durante todo el año. Ojalá tengan tanta curiosidad y sed de ti como estos días de Pasión, muerte y resurrección. Ojalá que busquen y elijan el mejor y primer lugar para verte, sin importar el tiempo o las obligaciones. Ojalá que siempre quieran compartirte con todos sus amigos y familiares, con tanta devoción como lo hacían sus caras al mirarte y mandar los WhatsApp. Ojalá que todos esos niños en brazos de sus padres sean los que te defiendan cuando el mundo dude de tu existencia. Ojalá que la Semana Santa no se quede en imágenes, procesiones y tradiciones, sino que perdure en los corazones de todos los que llenaban las calles.
Como dice la canción de @kenosismusica: «Quiero ser, ser lavado, ser curado y quiero morir a mí mismo. Quiero estar arrodillado, quiero vaciarme, quiero vivir como RESUCITADO».
Ojalá que todos los que te han visto estos días vivan como resucitados, con la alegría de dar testimonio de un Dios vivo. Y así siempre.
Ojalá que todos los que te han visto estos días vivan como resucitados
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