QUE NADA TE SEPARE DEL AMOR DE JESÚS
Ni el abandono de los Discípulos en la Hora de la Pasión
Ni la negación de Pedro
Ni la traición de Judas
Ni la incredulidad de Tomás
Ni la incapacidad de las Mujeres al no reconocerle Resucitado
Ni la torpeza de los de Emaús en entender hasta que partió el Pan…
Ni la …
Así al principio…
Ni la huida de personas de la iglesia por falta de credibilidad
Ni el poder de quienes se sienten dueños
Ni el dinero que atesora en sus templos
Ni el abuso de quienes se buscan a sí mismos
Ni el cansancio de líderes desencantados
Ni la ausencia de participación en las celebraciones comunitarias
Ni la falta de fe y compromiso de los creyentes
Ni la risita irónica de quien te diga que hueles a sacristía y cera
Es hoy…
¡Que nada ni nadie te separe del Amor de Jesús en la Cruz!
