En nuestra tradición cristiana, lamentablemente, la figura del Espíritu Santo ha estado asociada con lo mágico y lo abstracto. Pero la realidad es que el Espíritu Santo resulta ser de lo más concreto y contundente que podemos experimentar en nuestro camino de fe. Para anunciar y vivir esta certeza con los jóvenes, el legado espiritual de San José de Calasanz puede ser bastante iluminador:
- Aunque celebramos con una fecha especial –Pentecostés– la efusión del Espíritu Santo, resulta clarificador saber que el Espíritu toca constantemente el corazón, y podemos percibirlo: “la voz de Dios es voz del Espíritu que va y viene, toca el corazón y pasa; no se sabe dónde viene o cuando sopla; importa, pues, mucho, estar siempre atentos para que no se marche sin fruto” (EP 131. 22-11-1622)
- El encuentro con el Espíritu se da en el discernimiento concreto de nuestra vocación profunda, pues la Interna Inclinación es la misma guía del Espíritu santo, que nos conduce a la perfección del Amor (Cfr. Constituciones de Calasanz 123).
- De hecho, el gran aporte de Calasanz a la espiritualidad (vida según el Espíritu) es aterrizarla al “propio conocimiento” de los beneficios que Dios nos hace, así como de nuestra ingratitud a ellos (Cfr. EP1339 15-03-1630); allí entramos en contacto con la acción del Espíritu.
- Por supuesto, nos encontramos con el Espíritu Santo en los momentos de debilidad, de oscuridad y de muerte, pues se manifiesta como luz y fuerza; así se da la mayor revelación del Espíritu en una comunidad encerrada, llena de tristeza y temor, que sale con entusiasmo y valentía a anunciar la razón profunda de su alegría (Cfr. Hch 2,1-13).
- Finalmente, todas las pistas para recibir el Espíritu Santo, nos conducen al encuentro con los otros: a relacionarnos con ellos de manera auténtica, a construir comunidad y a servir a los hermanos más pequeños y necesitados.
Que nuestras acciones pastorales encarnen siempre este itinerario de relación con el Espíritu.
¿Calasanz es importante en nuestra vida? ¿Le dejamos que nos vaya pintando los caminos? ¿Le ayudamos a pintar a otras personas?
Una imagen que nos ayuda a pensar: ¿es un escolapio pintando un nuevo Calasanz o es Calasanz que nos va haciendo nuevos escolapios?
