NUEVAS MASCULINIDADES – Juan Carlos de la Riva

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Juan Carlos de la Riva

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Una de las cosas que más me ha gustado de la serie The Chosen, sobre la vida de Jesús (serie que, con alguna reserva, es perfectamente recomendable para el trabajo pastoral entre y con jóvenes), es que pone el foco más en los personajes que rodean a Jesús que en el propio Jesús. Y dentro de este cambio de enfoque, me gusta ver que los apóstoles representan diversidad de maneras de ser varón en aquel contexto judío patriarcal y, por tanto, condicionante de maneras de estar en el mundo desde la perspectiva de género. Y dentro de los personajes que más me llaman la atención está Mateo. Sí, lo que sabemos de Mateo está, su ser cobrador de impuestos. Pero se la ha añadido, cosecha de la imaginación de los guionistas, un estilo poco masculino y una manera de relacionarse bien diferente a la del modelo clásico de varón judío. No es solo su condición de pecador la que atrae a Jesús a buscar en Mateo el apóstol, también su diferente modo de estar en el mundo y la marginalidad a la que eso le arrastra al cobrador de impuestos.

Os presento un número que quiere ahondar en un tema que a nuestros jóvenes preocupa. Afortunadamente crece la sensibilidad feminista y la acción contra cualquier discriminación por motivo de género, y nuestros jóvenes varones son parte de esa nueva manera de hacer cultura. Pero se está hablando tanto de ellas, que siento que les faltan a los varones esas referencias importantes para llevar adelante una masculinidad coherente con esta manera de pensar igualitaria. A veces hasta surge en ellos la protesta que nos describe Eduardo Granados en su artículo: «Ya está bien de tanto feminismo. Ellas se creen superiores a los hombres; siempre están enarbolando sus derechos. ¿Y dónde están los nuestros?».

Desde este número de RPJ queremos abogar por la inclusión en la agenda de trabajo de la lucha por la igualdad una profundización en la riqueza y diversidad de lo masculino y su aporte a la fraternidad que queremos crear como cristianos/as y con todas las personas.

Desde Argentina nos llega un análisis lúcido de la necesidad de incorporar a nuestra pastoral esta sensibilidad: Agustín Podestá y Andrea Sánchez Ruiz Welch nos invitan a hacerlo acompañando a los jóvenes en la introspección, la escucha atenta, el discernimiento y los diálogos para favorecer una transformación interior capaz de traducirse en actitudes vitales más evangélicas.

Elena Alonso nos invita a descubrir que la diferencia entre XX y XY debe de ser vista como valor y nunca como algo reduccionista que encorsete y atrofie el potencial de las personas.

Y, desde Perú, Hugo Cáceres Guinet nos acerca una imagen de Jesús que encarna en sus actitudes y maneras de relacionarse una masculinidad acogedora y cuidadora, sensible y empática, comunicativa y en contraste con lo marcado por sus contemporáneos: podríamos afirmar que Jesús también está en salida de los patrones marcados en cuanto a su masculinidad se refiere.

Chema Pérez Soba nos invita a desideologizar este tema, pues lo real son personas en camino, con andares y rutas diferentes. La cita de Pablo nos recuerda que, en la perspectiva de Dios, ya no hay judío ni gentil, libre ni esclavo, hombre ni mujer… y que, por tanto, los roles sociales saltan por los aires en una nuava conciencia fraterna que se inaugura con Jesús.

Y del artículo de Oscar Alonso rescato para esta introducción sus cuatro propuestas pastorales: 

  • Plantearse qué modelo de persona estamos ofreciendo a la juventud actual. 
  • Ofrecer herramientas para trabajar el mundo de las emociones, los sentimientos y los afectos.
  • Trabajar las debilidades y las vulnerabilidades que tienen los jóvenes actuales. 
  • Acompañar procesos personales y grupales en los que hombres y mujeres nos reconozcamos diferentes y complementarios, iguales y diversos.

Esperamos que este número colabore a generar cultura del encuentro y no ideología, y que nuestros chicos y chicas disfruten de una nueva manera de entendernos como comunidad de diferentes. 

Nuestros jóvenes varones son parte de esa nueva manera de hacer cultura