LA EROSION DE LAS METAS Y LUCHAR POR LOS SUEÑOS – Miguel Ángel Jaimes Ruiz

Etiquetas:

LA EROSION DE LAS METAS Y LUCHAR POR LOS SUEÑOS Descarga aquí el artículo en PDF

Miguel Ángel Jaimes Ruiz

http://www.tcrisol.blogspot.com

La experiencia de acompañar el diseño de proyectos que afecten de forma positiva la vida de las personas desde el Evangelio es lo que me impulsa a persistir en este camino de servicio creativo y solidario.

A veces sucede que los agentes pastorales o educadores realizan actividades que pueden ser rutinarias repitiendo las mismas programaciones cada año en una parroquia o pueden ser creativas aportando novedad, conectándose con las búsquedas y necesidades de los destinatarios.

Detrás de llevar a cabo un proyecto pastoral, hay una intencionalidad, un sueño de Iglesia y sociedad que inspira y sostiene cada acción que ejecutamos con nuestras comunidades. Esto tiene un fuerte componente emocional por la visión que nos motiva a luchar por concretar nuestros ideales en metas.

No basta con una formulación clara de nuestros proyectos. Cuando nos proponemos una meta, con el tiempo se pierde el entusiasmo y dejamos de cumplirla o nos conformamos con algo mucho menor abandonando nuestro objetivo inicial.

Por ejemplo, Jorge Andrés se puede proponer la formación de cien líderes laicos en el tema de la sinodalidad con diez talleres novedosos aportando en su participación y protagonismo en la Iglesia y sus entornos. Pero se encuentra con la realidad, como la baja respuesta en la convocatoria, el poco apoyo de las familias de los laicos, los individualismos o la falta de recursos, que son situaciones muy comunes en la realidad.

Es aquí donde el entusiasta pastoralista que empezó con una gran motivación convencido de que la propuesta de formación a laicos sería un éxito total, al confrontar con la realidad experimenta tensiones que lo ponen a dudar si vale la pena seguir insistiendo en su proyecto y es cuando se da la erosión de sus metas.

Lo que sucede es que se dan tensiones entre la realidad actual y la visión que hemos construido inspirándonos hacia un nuevo futuro. Este sueño lo hemos convertido en una meta concretando un plazo de tiempo, unas coordenadas de lugar y detalles para su ejecución.

La tensión funciona como una banda elástica impulsando la realidad hacia la visión o impulsando la visión acomodándola a la realidad. La primera es la tensión creativa que nos impulsa hacia arriba a la conquista de las metas buscando todas las ideas novedosas y recursivas para lograr lo que nos hemos propuesto. La segunda es la tensión emocional que nos jala hacia la realidad rebajando la visión y la meta a algo más pequeño por la brecha o la distancia que nos encontramos en la implementación de nuestra iniciativa.

Reducimos el alcance de las metas, en el caso del ejemplo Jorge puede conformarse con veinte laicos y hacer una actividad formativa un fin de semana para decir que cumplió. Acomodo la visión a la realidad.

¿Cómo superar la erosión de metas?

Sostener la visión desde el convencimiento y la perseverancia. Insistir en conseguir la meta y nos disminuirla, sino buscarla en plenitud evaluando al final las dificultades y avances que se dieron en el camino. Es realizar el esfuerzo de no conformarse con menos y buscar el logro de la visión.

Se requiere del liderazgo del luchador que busca vivir su visión y compartirla con otras personas, no necesariamente buscando éxito y fama, pero si la realización de un sueño que seguramente aportará a un cambio personal y una transformación de realidades de su entorno.

Finalmente, compartir tu visión y sumar aliados en la familia, amigos o compañeros, es una buena manera de impulsarse desde la tensión creativa que ayudará a la realización de las metas superando con el apoyo de los demás los desafíos de la vida.