«En nuestra historia, la música cristiana ha sido espacio de encuentro…»
Ruah somos un grupo de música católica de Pamplona, lo formamos amigas y amigos que hemos ido encontrándonos en el camino de la música y la fe. Comenzamos en 2011 y desde entonces hemos grabado cuatro CDs: “De frente”(2012), “15 olas” (2014), “Sucedió” (2018) y “Nuestro lugar” (2022). Desde el principio nuestro objetivo ha sido compartir la Palabra y la vivencia de fe a través de la música, como cauce facilitador del encuentro con Dios.
¿De dónde viene el nombre del grupo?
Ruah es una palabra hebrea que significa aliento de Dios, espíritu, soplo, viento… Escogimos ese nombre porque desde el principio hemos sentido que Dios nos va guiando y dando impulso. Cuando empezamos estaba siendo un momento de cambio en nuestras vidas, de fiarnos y andar nuevos caminos. Fue en ese momento cuando empezamos a componer, siguiendo esa misma llamada que sentíamos a dejarnos guiar.
¿Cómo os conocisteis? ¿Quiénes formáis el grupo?
Nos hemos ido encontrando a lo largo de los años cantado en parroquias, en celebraciones, en otros grupos de música, pero hasta 2011 no nos juntamos para empezar a cantar como Ruah. Cuando grabamos el primer CD “De frente” en 2012, éramos cinco personas, y hoy, entre voces, instrumentos y colaboradoras somos 13. En el último CD hemos participado: Mentxu León, Nerea Araujo, Cristina Pascal, Nat Barrett, Javi Laforet, Marta Lajos, Irantzu Sarriguren, Fermín Hurtado, Maite Rey, Juan Fernández y María Peralta. Pero además de quienes cantamos y tocamos, a nuestro alrededor hay un montón de personas que nos acompañan, animan. De una forma u otra también forman parte de esta familia: apoyando en conciertos, grabaciones, edición de vídeos, fotos y apoyando en redes sociales.
¿Cómo es vuestra música?
Hacemos la música que recibimos. Contamos y cantamos lo que vamos viviendo en nuestro camino de fe o lo que anhelamos en lo más profundo de nosotras. Canciones que reflejan algo que en ese momento está siendo Palabra para nosotras, sepamos o no responder. Cantamos las dudas, los deseos, las heridas de esta tierra, la esperanza, el dolor, la alegría, las promesas, la fe…
Componemos y en esa composición cada una de nosotras pone lo que tiene, lo que sabe, lo que puede entregar, y poco a poco, paso a paso, en proceso y en comunidad, la canción va despertando y cogiendo forma, como semilla que crece y se prepara para dar fruto.
¿Cómo os ha acompañado la música en vuestro proceso de fe?
En nuestra historia, la música cristiana ha sido espacio de encuentro. Hemos crecido con música de Brotes de Olivo, Ixcis, Ain Karem, Cristobal Fones, Salomé, Nico Montero, Santiago Benavides y tantas y tantos músicos más.
Con la música sucede que, sin darte cuenta, de pronto, algo toca un resorte que no sabías que estaba ahí, o se cae un trozo de coraza… entra el Espíritu y te susurra. Componer y cantar música cristiana es para nosotras un cauce de expresión, de oración, y también una llamada: esto es lo que tenemos para dar, y la compartimos porque vemos que hay gente a quien le ayuda para abrir puertas a la oración, pararse en el silencio, frenar el ritmo y, queriendo o sin querer, entablar conversación con Dios, acallar, adentrarse y escuchar… para salir hacia la vida y hacia los demás.
¿Cómo son vuestros conciertos?
Solemos intentar responder a todas las llamadas que nos hacen desde parroquias, movimientos, colegios… aunque a veces no ha sido posible por tema de fechas o disponibilidad. Cada invitación que nos llega nos hace mucha ilusión, es una alegría. Queremos ofrecer momentos para parar y ponerse a la escucha, compartir, celebrar en comunidad, donde la Palabra sea el centro. Ofrecer nuestro testimonio de forma sencilla y cercana, intercalando textos bíblicos, poesías, gestos, palabras de testigos. Compartir con quien nos invita y escuchar nuevas voces en esos encuentros. Invitamos siempre a que la gente cante con nosotras si conoce las canciones. Rezar así, con música y en comunidad es un regalo muy grande.
¿Qué nos podéis contar sobre vuestro último álbum?
Después de “De frente”, “15 olas” y “Sucedió” este cuarto CD se titula “Nuestro lugar”. En su centro tiene esa experiencia de encuentro con Dios, ese instante de intimidad, único y diferente para cada persona, y a través del cual Dios nos transforma, nos abre a la posibilidad, a la esperanza, al tesoro, a la entrega, al Amor. Al final, todas las canciones del CD brotan precisamente de ese “nuestro lugar”: canciones con la Palabra como germen, canciones de confianza, de asombro ante el lenguaje y la ternura de Dios, de búsqueda, de grietas y caricias… Ojalá os guste.
¿Cómo colaborar entre todos como iglesia a que surja más música católica y se busque más música católica?
Creemos que se está haciendo mucha música católica de calidad. Las redes sociales son un escaparate y también las plataformas digitales, donde cada vez suena más música católica, pueden favorecer a que quien busca encuentre y a que sea accesible a todas las personas y desde cualquier parte del mundo. Páginas y aplicaciones como Rezando Voy, Fe Adulta, Evangelio Orado y otras, nos ayudan a rezar cada día con la Palabra y con canciones concretas de diferentes autores y grupos.
Por otro lado, las colaboraciones entre grupos de música y cantautores, compartir ahí, es un modo de multiplicar, la diversidad es maravillosa. Cada vez se van haciendo más cosas así y es una gozada sumar y celebrar.
Acercar toda esta novedad a los grupos parroquiales, a los coros familiares y de jóvenes, a las asociaciones… es el reto que está por caminar.
De cara al futuro, ¿qué? ¿Con qué nos vais a sorprender?
Ahora mismo estamos felices con este CD nuevo, y no sabemos por dónde irá soplando el Espíritu. Siempre andamos haciendo malabarismos entre vida familiar, trabajos y demás, para poder ir respondiendo a las propuestas de conciertos que nos van llegando y, mientras, seguimos componiendo. De hecho, tenemos ya canciones nuevas suficientes para grabar otro CD, pero nuestro proceso de grabación es bastante lento y no siempre tenemos suficiente presupuesto para costear el gasto que supone, así que iremos poco a poco, preparándolas, soñando, deseando… y confiando. No sabemos muy bien por dónde se abrirá el camino, así que seguiremos a la escucha y os iremos contando.
¿Cuál es la canción tuya que recomendarías a un animador de jóvenes para llevarlo a su actividad pastoral y por qué?
Cualquiera de nuestras canciones podría servir en un trabajo de pastoral, pero dependerá del tipo de grupo, la edad, el momento en el que están. Nuestras canciones reflejan momentos de nuestros propios procesos, tienen siempre presente la Palabra y procuramos que el lenguaje llegue al corazón más que a la cabeza. Cantamos experiencias reales, con la fuerza y la verdad que tiene la Palabra, lejos de explicaciones teóricas. Ojalá tengan cabida en nuestros trabajos pastorales.
Aquí os proponemos tres canciones de nuestro último CD que hablan de distintos modos y con distintas palabras sobre la fidelidad de Dios y su empeño-amor en cada una de nuestras vidas.
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