Creo en el “MILAGRO” de una familia que se desplaza a Egipto
como respuesta a una urgencia por salvar la vida de su hijo.
Creo que muchas cosas empezaron a cambiar:
Empezó a cambiar los movimientos migratorios obligados por la falta de justicia,
la lucha por la defensa de los inocentes, la búsqueda de la dignidad de la persona,
la cruda realidad de abrirse camino en un país extraño.
María en familia se ubica en otra realidad para salvar lo que más ama,
busca salida para el futuro de su Hijo, se incultura para identificarse con el pueblo que la acoge, se abre a la novedad…
ACOJAMOS con diálogo y buena intención a las personas que vienen de fuera
para dar credibilidad a nuestro pasado de “tres culturas”, y seamos hoy y aquí expresión de acogida y solidaridad.
