Daniel Poli es uno de los pioneros mundiales de la música espiritual contemporánea. Es argentino y es «porteño», con todo lo que significa eso de humor, de capacidad de argumentación, de sonrisa psicoanalista para el encuentro con la gente, de entrañable sorna … Roquero de forma y de corazón, músico desde sus inicios de vida, estuvo componiendo y compartiendo sus canciones desde muy joven y durante años por toda la gran Argentina. En un momento sintió que se sentía solo, que no conocía a nadie más que estuviese empeñado en compartir su experiencia espiritual por medio de la música de la calle, y comenzó a salir de su país.
Viajó, conoció y conectó con Martín Valverde y Luis Enrique Azcoy y con otros trovadores americanos que llevaban, como él, años haciendo eso. Luego viajó a España y se encontró con Llovio y con un tal Migueli que también llevaban tiempo haciendo eso por aquí. Se sintió muy muy acompañado y participó en un montón de proyectos compartidos por todo el mundo como «Pescando en Red», «Lenguas de Fuego» o «Enredados», proyecto de un éxito e influencia tremendas por toda América, y se hizo uno de los imprescindibles de este género.
Daniel trató de recorrer los circuitos comerciales de música y vio que, nadie sabe por qué, Dios no le dio puerta por ahí. Claramente su música es la que debía y debe llenar otros inmensos ambientes que no la conocen, que no tienen esa música nueva, mucho más que los circuitos convencionales. Así que fácilmente se le abrió un extraordinario mundo lleno de público ansioso de encontrar una música de ahora que les llenase el alma y su deseo infinito de búsqueda. Y ahí llega este roquero porteño y cristiano para dar fuerza, humor, ocurrencias y buena música a todos los buscadores.
Profesor de Filosofía y Ciencias religiosas por decisión propia para estar día a día al lado de los jóvenes, y miembro de una estupenda y activa comunidad no para de recorrer el mundo con sus canciones y su extraordinaria experiencia.
Tiene un montón de discos y de colaboraciones, y es un gran compositor. Tiene la capacidad de hacer temas de calle, de conciencia social, de luz para la búsqueda, de honda visión espiritual, y tiene el don de hacer cosas muy muy sencillas de esas que te dan un golpe justo donde más falta te hace. Destaco en esta categoría su canción Yo creo en las promesas de Dios, un auténtico hit mundial lleno de sencillez y de eso que no sabe nadie qué es, pero que hace de una canción algo especial y que llena por dentro.
Busca a Daniel Poli y te vas a encontrar mucho más que a un cantante. Si tienes la suerte de verlo en directo verás que será también mucho más que pasarlo bien (que también lo pasarás de maravilla). Temas como el Dios de la vida y Adorador son también éxitos indiscutibles de Dani. Toda una institución en esto de la música espiritual este artista integral, argentino universal y amigo querido que es Daniel Poli.
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