68º SEMINCI RPJ 563Descarga aquí el artículo en PDF
Fernando Donaire, OCD
Esta nueva edición de la Seminci, que va por la 68 edición, estrena director, José Luis Cienfuegos, quien renueva una sección oficial mucho más plural y apuesta por un cine donde los jóvenes son los directores y los protagonistas.
Un festival de cine es una oportunidad de conocer un extenso panorama de película seleccionadas por un grupo de personas que hay que seguir casi con cierta extenuación porque en pocos días se proyectan muchas películas, pero que regalan la posibilidad de acercarte al panorama cinematográfico actual desde muchos puntos de vista.
Quo vadis, Europa?
IMAGEN Fotograma película Yo capitán ALBUM alb9837153
De la amplia selección de películas del festival en su sección Academia europea de cine nos quedamos con una perla, Io capitani en la que un joven es el protagonista de un viaje, de una odisea, desde Senegal hasta Sicilia. La nueva cinta del multipremiado Matteo Garrone abre de par en par el submundo de pobreza, pillaje, corrupción y falta de humanidad en el viaje hacia la libertad que tienen que hacer los jóvenes si quieren escapar de la situación de pobreza a la que les lanza el futuro en su propio país. Seydou tendrá que afrontar ese viaje con apenas dieciséis años teniendo que dejar atrás su adolescencia para convertirse en «capitán» en este viaje desquiciado hacia la supervivencia.
Al otro lado del charco, en Cádiz, otra adolescente, Andrea, se enfrenta también con su edad a los problemas que no han sabido resolver sus padres. El amor de Andrea, la nueva película del español Manuel Martín Cuenca, que se estrenó en la sección oficial, es un viaje iniciático en el que su protagonista busca encontrar a su propia familia intentando recomponer un pasado silencioso y oculto de unos padres casi desaparecidos. La película cuenta con una delicada banda sonora y preciosa canción final del grupo Vetusta Morla.
Los adultos y los jóvenes también aparecen en la fantástica Green Border de la polaca Agnieszka Holland, que es una de mis películas favoritas del festival y que desarrollaré más adelante, coincidiendo con su estreno en España, en esta misma revista. Aquí, los refugiados de las guerras se encuentran perdidos en el limbo de la línea verde entre Bielorrusia y Polonia. Una película necesaria que te deja sin aliento por lo que cuenta de fondo y por el realismo y la verdad con que lo hace, a pesar de utilizar el blanco y negro.
Viajes iniciáticos
Los jóvenes son también los protagonistas en dos de las películas más controvertidas de la sección oficial: The Sweet East de la directora Sea Prince Williams y How to hace sex de Molly Manning Walker, ambas sin fecha de estreno en España.
La primera venía de Sundance y en mi opinión se pierde en las referencias y en el juego con una chica adolescente actual que pretende hacer el viaje de la Alicia de Carroll, millennial y postmoderno. En ese escenario juega y desde mi punto de vista, también naufraga.
La segunda, dirigida por Manning, juega en otra liga, la que refleja las fiestas multitudinarias de jóvenes en playas turísticas para celebrar el fin de etapa escolar y la entrada en la universidad. Mucha droga, alcohol y fiesta. Y cosas por terminar y a las que enfrentarse, con apenas 17 años, total libertad de la familia en medio de una ciudad sitiada para la fiesta y el placer. Se desarrolla en Italia, pero podría ser cualquier lugar costero de España. Muchos de nuestros jóvenes asisten a fiesta similares en Mallorca o Ibiza. Y la película muestra también el reverso de estas celebraciones que, en algunos casos, no dejan indemnes a sus protagonistas apareciendo en forma de traumas y malas experiencias lo que pretendía ser una fiesta. Sin demasiada profundidad, pero con alguna que otra propuesta interesante.
Ambas películas son necesarias para entender y profundizar en el mundo adolescente y juvenil, lo que sueñan, en lo que gastan sus días, en aquello que ponen sus esperanzas.
¿Cine espiritual?
IMAGEN cartel película Teresa ALBUM alb9860176
Para cerrar esta crónica del paso por el festival hago referencia a otras dos propuestas que me parecen muy interesantes. La primera, Teresa de Paula Ortiz, un nuevo acercamiento a la mística, Teresa de Jesús. Y su directora lo hace en clave de mujer y arropada por el texto teatral de Juan Mayorga La lengua en pedazos. Además, se acompaña también de dos grandes de la escena como son Blanca Portillo, en el papel de la santa y Asier Etxeandía en el rol del inquisidor. Con la duda como leit motiv la cinta nos plantea las propias, al espectador, mientras que el inquisidor lo hace con Teresa. La cinta es una oportunidad de acercarse de nuevo a un personaje tan interesante y fascinante y aún tendremos que esperar hasta el próximo día 25 de noviembre para poder verla en los cines.
Samsara de Lois Patiño –estreno en cines 15 de diciembre– también está protagonizada por adolescentes en su mayor parte. Historia casi documental que se cuenta a caballo entre Asia y África, esconde dentro una experiencia espiritual, sensorial que me fascinó. Por la valentía de la propuesta y por lo novedoso de la misma. Puro cine en contacto con el espectador.
Espigas y espinas
No hablaré del palmarés porque ya lo han hecho muchos compañeros de prensa y porque esconde en muchas ocasiones la política de la reverencia en estos casos. A mí me quedan muchas en el tintero que iré desgranando en la sección de cine de la revista a partir del próximo año. Lo demás es celuloide, sueños y vida que nos sigue invitando a vivir.