Los jóvenes y en general todas las personas, queremos alcanzar “lo más alto de la montaña” (vamos… que seamos unos cracks en lo que nos motiva), enseguida queremos ser ese Messi en el fútbol o ese AuronPlay en YouTube. ¿Qué pasa cuando no llegamos a alcanzar esa cima? Nos desmotivamos.
Y un poco me pasó cuando comencé la universidad. No os voy a mentir, bachiller también me costó mucho esfuerzo sacarlo, a pesar de que me considero que no saco malas notas. Un gran afán de darlo todo en mi primer cuatrimestre de Ingeniería Informática. ¡Plof!
España como mayor tasa de abandono escolar en 2018: 17,9% en la Unión Europea.
¿Qué es lo que pasa en nuestras aulas hoy en día? ¿desmotivación? ¿por qué cada vez más, hay jóvenes que abandonan el colegio o la universidad? Tenemos claro que esto forma parte de una cadena en la que intervienen muchos aspectos, entre ellos los profesores (que sí, que hay muchos extremos, unos buenos y otros no tantos), las asignaturas (que yo no necesito derivar para el trabajo que me gustaría tener) o el modelo escolar.
¿Tengo yo también parte de culpa?
Próximo martes, más sobre educación.
